
Esta delicia es una de las muchas razones por las que los turistas visitan la encantadora ciudad de Nanaimo, en la Columbia Británica. Aunque su presentación es sofisticada, este clásico dulce de tres capas no necesita pasar por el horno.
½ taza (125 g) de mantequilla sin sal
¼ taza (50 g) de azúcar
5 cdas. (75 ml) de cacao
1 huevo batido
2 tazas (415 g) de migas de galletas Graham
½ taza (125 g) de almendras finamente picadas 1 taza (250 g) de coco rallado
½ taza (125 g) de mantequilla sin sal
2 cdas. (30 ml) de crema
2 cdas. (30 g) de crema pastelera de vainilla en polvo
2 tazas (500 g) de azúcar glass
4 cdas. (60 g) de chocolate semidulce
2 cdas. (30 g) de mantequilla sin sal
1. Derrite los primeros 3 ingredientes a baño maría y mézclalos bien. Agrega el huevo y remueve hasta que espese.
2. Retira del fuego y añade las migas, el coco y las almendras.
3. Presiona con firmeza en un molde sin engrasar (20 cm x 20 cm).
4. Mezcla la mantequilla, la crema, la crema pastelera en polvo y el azúcar glass. Bate hasta obtener una mezcla ligera y suave.
5. Extiende la mezcla sobre la capa inferior.
6. Derrite el chocolate y la mantequilla a fuego lento, remueve y deja enfriar.
7. Después de enfriarse (pero aún líquido), vierte la mezcla sobre la capa intermedia y colócala en el refrigerador.
Para cortar las barritas apropiadamente, espera a que la capa superior se haya endurecido por completo. Traza suavemente las líneas por donde cortarás las barritas. Luego, déjalas a temperatura ambiente y córtalas con un cuchillo fino y afilado.